martes, 11 de enero de 2011

Inmortalidad capicua

Pues sí, seré claro, hoy quería hacer un texto jugando con la fecha de hoy, pero antes debo decir que, para colmo de males, me han robado por segunda vez mi bici. Sí, esa que me regalaron por mi 18 cumpleaños; nada mejor que salir cansado de la universidad y encontrarme sin el que ha sido mi medio de transporte durante 1 año. Ojalá pase pronto esta mala racha.

Pero bueno cada vez consigo que mi parte pesimista o quejica, como la queráis llamar, me robe menos líneas. Confesaré que tomé la mano de mi amiga la música, aún así :-) .
Y bien, hoy es un día curioso, 11-1-2011, caramba cómo pasa el tiempo... Hoy quizás no sea el día con más unos de la historia del hombre inteligente, pero casi casi! Qué decir del 1, ese número que engaña, que todos queremos poder ser alguna vez, en el que tanto cuesta mantenerse y el que peor persona te puede hacer si te dejas llevar por la avaricia. Es divertido, sí, hoy sólo escribí palitos cabizbajos en la esquina superior derecha de mis apuntes: parecían convencidos de que iban a caer olvidados en mi mochila. Pues no. Mañana aprovecharé la tarde de estudio para comprobar que seguís ahí, que sois muchos y no quiero perder ninguno.

Y es que vamos creciendo, y no sabría decirte qué prefiero, seguramente un punto intermedio... Crecer, pero sin perder esas cosas que sólo se hacen cuando tienes 18 años. Y no es que desprecie la vida de la gente madura, no. Simplemente prefiero actuar tal y como lo hago ahora, no quiero dejar que nada corrompa mi forma de ser: me considero una persona natural, me gusta dar sin recibir; pero si me dan, me quedo en deuda interiormente con esa persona. Muchos amigos y amigas se sorprenden cuando les invito a algo sin previo aviso. "Por qué?", me dicen. Y yo les respondo con una tímida sonrisa, pensando: solamente precio tu amistad, y como eres mi amigo, no digas nada, disfruta.

La vida está llena de pequeños momentos, como un eterno desierto de dunas serpenteantes... Nuestra existencia está formada por infinitos granitos de arena, milésimas de segundo, chispas de pensamiento, sensaciones inusitadas, sonrisas esporádicas... Todas ellas conforman senderos, esos pequeños caminos sin arcén que formamos al caminar por el desierto. Como buenos caminantes que somos, encontramos, mientras nuestros pies desnudos sienten esos millones de microdetalles de vida, cosas como oasis... Personas que nos ayudan como si fueran hermanas, e incluso espejismos: personas que no nos ayudan como hermanas pero aparentan hacerlo, y se esfuman cuando nos damos cuenta de ello :-)

Como ves, querido lector, de todo en la vida se puede formar una representación, todo se puede desglosar, montar y maquillar para explicar cualquier situación. Trata de encontrar la tuya para la vida, y llegarás al otro lado del desierto con la alegria de que el que quiera podrá seguir tus pasos, pues recuerda:

Inventaste un mundo sin corrientes de aire que borren tus pisadas, la inmortalidad sin buscarla. Y si no lo hicistes, ¿a qué esperas? Adelante.

2 comentarios:

  1. Te superas en cada escrito. Se ve que vas viviendo mas... De momento es lo mejor que he leído de ti, lo mas profundo y mejor escrito. Sigue por ese camino me da gusto leer todo lo que colocas en este blog.
    un beso de tu abuelo.

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  2. Y eso que no estoy pasando unos buenos días, imagina si tuviera la mente despejada :)

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